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Historias que contar

De acuerdo con información oficial, Alejandro Moreno, dirigente nacional priista, diría la última palabra tanto en coaliciones como en candidaturas directas, en el marco del proceso electoral de nuevas gubernaturas de seis estados.

Se enfatizó que se respetaría una paridad de género, la que se llamó estrategia integral.

Pero de pronto hubo viraje, según se comentó el miércoles por la noche, señalándose que habría coalición con el PAN y lo sorprendente, que este partido  postularía a una mujer de candidata, pero que sería externa, es decir no parte de las filas de Acción Nacional.

En apariencia, la elegida sería Carolina Viggiano.

Significa, en el caso particular de Hidalgo, que la diputada federal, tendría mano como candidata, aunque no por el PRI.

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Y además habría un candado porque el otro perfil, semejante en consensos y aceptación, Israel Félix Soto, alcalde de Mineral de la Reforma, según esta corriente de los altos mandos del tricolor, estaría invalidado.

De ser así, los priistas hidalguenses poco o nada podrían expresar de sus preferencias ante la inconmovible última palabra de la cima de los jerarcas de su instituto político.

Esto recuerda añejos tiempos en que el PRI postulaba a través de decisiones cupulares, del Presidente de la República y en las entidades consensada con mandatarios locales.

Se hace así eco a añeja película excelentemente titulada Pídele al tiempo que vuelva, y aquí sí retornó.

En ese marco circularon en redes diversas versiones, aunque lo más sensato es esperar para confirmar puntos de vista.

En Morena también se han agitado las aguas tras resultados de encuestas, con aspirantes que no fueron escogidos. Entre ellos sobresalen Susana Harp, de Oaxaca; José Ramón Enríquez, Durango; Maribel Villegas, Quintana Roo; Aldo Ruiz, Aguascalientes y Maki Ortiz, Tamaulipas.

Recurrirán, dijeron, a la sala Superior del Tribunal Electoral.

El amor lo superó

Gary Warren Hart, nacido en Ottawa el 28 de noviembre de 1936, militante del Partido Demócrata, pudo haber cambiado la historia moderna de la política norteamericana. No fue así, su inclinación por bellas mujeres lo impidió

Este es el tema central de la película El Candidato –en inglés The Front Runner– que se estrenó en noviembre de 2018 con Hugh Jackman en el papel principal.

Por cierto, este actor australiano, de 53 años, dijo hace poco que estaba afectado por Covid, aunque señaló que sus síntomas eran leves.

Hart, graduado en Derecho por la Universidad de Yale en 1964, se unió como joven voluntario en la campaña presidencial de John F. Kennedy.

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Empezó de hecho promisoria carrera. En 1974 fue candidato a senador y ganó la elección. Sería reelecto por dos periodos consecutivos representando a Colorado.

Se especializó en tácticas militares. Defendió la energía nuclear como opción válida y, asimismo, promovió el desarrollo de la energía solar.

En febrero de 1983 anunció su intención de postularse por la Presidencia de su país. Al final perdió ante Walter Mondale.

Algunos grupos lo señalaron por tener “ideas antiguas y poco claras”. Igualmente le afectó que en dos ocasiones se había separado de su esposa, aunque después conciliaron.

En 1986 ya no buscó un tercer mandato en el Senado y el 13 de abril de 1987 anunció su segundo intento por llegar a la Casa Blanca en comicios de 1988. Tenía 50 años.

Sus posibilidades eran amplias.

Pero circularon rumores de estar relacionado con una modelo de 29 años, Donna Rice. Un día la citó en su casa y fotógrafos del Miami Herald captaron a Rice abandonando el inmueble. Después el National Enquirer publicó en portada imágenes de Hart con su amante sentada en su regazo.

Renunció a su campaña y afirmó que era víctima de una “persecución calumniosa”. Quedó fuera de la carrera.

Todavía hubo en 2004 alentó volver a competir por la Presidencia, pero al final lo desechó y regresó a su hogar con su esposa. En definitiva se agotaron sus intentos.

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