Los abusos y excesos de un jefe policiaco

Los abusos y excesos de un jefe policiaco

El abuso de poder e influyentismo que tanto ha cuestionado y rechazado el actual gobierno y que en el pasado le costó el repudio social a quienes ocuparon el inmueble de Plaza Juárez

Leonardo Herrera
Abril 23, 2025

El abuso de poder e influyentismo que tanto ha cuestionado y rechazado el actual gobierno y que en el pasado le costó el repudio social a quienes ocuparon el inmueble de Plaza Juárez, parece poco importarle al director de la policía preventiva y aspirante a subsecretario de Seguridad Pública en el estado (SSPEH), Ricardo Velázquez Rivera, involucrado en la causa penal 73/2025.

En este mismo espacio, relatamos como el robo cometido en aparente estado de ebriedad por el funcionario el pasado 18 enero, terminó por convertirse en una carpeta de investigación de tentativa de homicidio en contra de tres personas, una de ellas detenida en el cereso de la capital.

De acuerdo con los testimonios de las víctimas, obtenidos en la carpeta de investigación 12-2025-00853 y en entrevistas, todo comenzó el sábado 18 de enero, cuando Edgar “N” terminaba de trabajar en la colocación de carpas para los visitantes al Cereso el domingo, tomó fotografías y vídeos para enviar la evidencia a quien lo contrató.

El infortunio hizo que en ese momento, llegará Ricardo Velázquez, quien se desempeñaba como director de la policía procesal y del cereso de la capital, en completo estado de ebriedad, le reclamó al joven trabajador por grabarlo y le apunto con su arma de fuego, enseguida según el testimonio de Edgar, lo despojó de su celular, una mochila y su gorra, además de amenazarlo.

El afectado dio aviso a sus familiares del robo y llegaron a auxiliarlo y fue cuando todo se complicó, pues el funcionario literal les “aventó” el vehículo en el que circulaba, además de subirse al camellón, del bulevard minero, a la altura de un negocio identificado como “materiales Vite” cuyas cámaras todo lo registraron.

Velázquez Rivera, fue golpeado por los familiares del afectado, quienes sin saber que se trataba de un funcionario de la policía, lo obligaron a devolver el teléfono celular, la mochila que contenía la cartera y las demás pertenencias, al hacerlo el jefe policíaco sacó su arma para defenderse y la accionó en dos ocasiones, esto hizo que los familiares lo sujetaran y forcejearan hasta desarmarlo.

Pero la carpeta de investigación y causa penal, sólo tiene la parte en la que aparentemente Edmar H.L., papá de la víctima, lo sujeto del cuello para que dos personas más golpearan al funcionario de la Secretaría de Seguridad, en diversas partes del cuerpo y no las causas del hecho, ni el robo, tampoco el estado inconveniente en que se encontraba, mucho menos las pruebas periciales para confirmar que accionó el arma y tampoco que fue literalmente rescatado de las instalaciones de la Secretaría de Seguridad en Pachuca, por el ex subsecretario de esa corporación Germán Trejo Hernández, es decir, todo esta acomodado para exonerar a Velázquez Rivera de su irresponsabilidad, excesos, abuso y delitos cometidos.

Un poco de la honestidad y valores que se pregonan en la SSPH, además de rigor en las investigaciones y pruebas incluso grabadas en las mismas cámaras del C5i y del Cereso de Pachuca, permitirían esclarecer que el funcionario es víctima de sus propias conductas y no de quien hoy está encarcelado por tentativa de homicidio que no cometió, pues en todo caso, serían lesiones y riña, basado en los testimonios y pruebas del expediente.

De mi tintero… El grupo Universidad y particularmente Damián Sosa y el ex rector Adolfo Pontigo Loyola, comenzaron la operación para apoyar a todos los jueces que aspiran a cargos en el Poder Judicial federal y claro que no cuenta con la simpatía oficial, la promesa va desde dinero hasta los 30 mil votos en próximo primero de junio, el problema es la falta de credibilidad en sus promesas…