Hidalgo está en lugar 16 dentro de la tabla nacional en obesidad

Uno de los propósitos que más se plantea la población ante la llegada de un nuevo año es el de perder peso, es común escuchar decir la frase “este año, sí me pongo a dieta”.

A la llamada cuesta de enero, se une la condición de salud que también tiene uno de los más altos en la calidad de vida de la población: la obesidad, detonante de enfermedades crónicas, el principal reto que enfrenta el sistema de salud en México.

La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2021 señala que, en México, 74.1 por ciento de las personas adultas y 38.2 por ciento de niñas y niños tienen sobrepeso u obesidad.

Las últimas cifras de la Secretaría de Salud federal son categóricas: la obesidad va en aumento en el país, y el territorio hidalguense se encuentra a la mitad de la tabla en obesidad, ocupa la posición 16 de las 32 entidades federativas.

De acuerdo con el boletín epidemiológico del Sistema Único de Información, de la Secretaría de Salud Federal, en Hidalgo se diagnosticaron 41 casos de obesidad a diario durante el año pasado.

En 2022, la entidad sumó 15 mil 245 casos de obesidad en hidalguenses, 5 mil 639 en hombres y 9 mil 606 en mujeres. En la última semana, (del 25 al 31 de diciembre), en consultas médicas se detectaron 162 casos de obesidad.

Lo anterior representó un incremento a nivel estatal de 11.40 por ciento en la incidencia respecto al 2021, año en que hasta la semana 51 se diagnosticaron 13 mil 507 pacientes con obesidad, según el reporte epidemiológico federal.

Mientras que, en el país, se diagnosticaron 809 mil 069 casos de obesidad, 326 mil 062 más que en 2021, cuando el acumulado fue de 483 mil 007 registros de pacientes con obesidad.

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Con educación se puede evitar obesidad: especialista

Ante la llegada de pacientes con complicaciones propias de la obesidad, Fabiola Muñoz, licenciada en Nutrición por la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), contó a La Jornada Hidalgo que se especializó en diabetes para brindar una mejor orientación particular.

“La obesidad actualmente por la Organización Mundial de la Salud (OMS) no está catalogada como una enfermedad. Es una condición que se caracteriza por un alto nivel de grasa corporal y se divide en tres: 1,2, mórbida”, explicó.

“Pero esas tres condiciones ya nos van a empezar a direccionar a complicaciones propias de la obesidad: diabetes, hipertensión, triglicéridos altos, enfermedades del corazón, hasta cáncer, principalmente de colón y en las mujeres ya está demostrado que el cáncer de mama”.

En relación con el sobrepeso, puntualizó que en esta condición comienza la resistencia a la insulina, los niveles de glucosa aumentan, pero todavía es un nivel que se puede revertir para la aparición de cualquier enfermedad.

Basado en datos de la Ensanut, la especialista resaltó que Hidalgo es uno de los estados con mayor población obesa, “principalmente por el consumo de comida procesada y es en mujeres donde más se está observando la prevalencia de sobrepeso u obesidad”.

La nutricionista consideró que el tema del etiquetado de alimentos es alarmista, que quizá de pronto hace reflexionar a la población, “pero me resulta importante resaltar que se tomó en cuenta la porción completa que hay en el empaque”.

“En mi práctica profesional no me gusta etiquetar alimentos buenos y alimentos malos, sino más bien educar a las personas y enseñarles qué y cuándo te vas a comer algo y con qué frecuencia”.

Por otra parte, Muñoz desmanteló que la palabra dieta y nutriólogo sea igual a pasar hambre, comer lechuga, apio y agua, pues aseguró que su visión como profesionista en esta rama de las ciencias de la salud es reeducar a las personas, porque de ahí parte todo.

“Teniendo las herramientas para una vida más saludable, es donde vamos a poder prevenir todas las enfermedades que tanto nos están aquejando. La nutrición es un tema que vamos dejando de lado, priorizamos otras cosas”.

Covid trajo la reflexión de prevenir enfermedades

Desde la perspectiva de la nutrióloga, Fabiola Muñoz, la pandemia hizo a la población valorar más el tema de la salud, se preocupó más por la alimentación luego de que la obesidad fue considerada como un factor de riesgo en personas con Covid-19

La dietista destacó un estudio que se realizó sobre la grasa visceral y las complicaciones ante Covid, “es la grasa más peligrosa porque es la que se encuentra adherida a un órgano, esa grasa era la que estaba condicionando las complicaciones de Covid”, dijo.

“El Covid-19 nos movió en el sentido de prevenir, el pensamiento cambió mucho. A mi consultorio ya han llegado más por un tema preventivo, antes nada más era , ahorita es <>”.

No obstante, también indicó que el tema de la obesidad va más allá de ser un factor de riesgo que sea resuelto solo con cambio de hábitos de alimentación. Explicó que la obesidad es una condición motivada también por el sedentarismo, la parte genética y social.

“Sí hay un gen que si se activa puede condicionar al peso o la obesidad, pero se puede mantener recesivo si mantenemos un estilo de vida sano desde la infancia”, mencionó la especialista.

“Las emociones sí condicionan la ingesta de alimentos, cuándo hay una emoción que nos está moviendo ya no somos tan conscientes de qué y cuánto estamos comiendo o cuál es la calidad del alimento”.

La obesidad sale cara

“Reflexionar sobre el estilo de vida que estamos llevando, ¿nos va a hacer que lleguemos sanos a los 50, 60 o 70 años? ¿Cómo nos queremos ver en 10 años? Un padecimiento de diabetes no solo te afecta a ti, también afecta al entorno, vivir con diabetes es una enfermedad cara”.

Así lo analiza la nutrióloga Fabiola Muñoz, quien de manera alterna a la consulta particular “Vida Sana”, ofrece 30 minutos de ejercicio a las mujeres en un gimnasio, “porque son ellas las que se preocupan por otras personas y que van dejando su salud al final”.

De acuerdo al estudio “La Pesada Carga de la Obesidad: La Economía de la Prevención” México es el país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en donde el sobrepeso, la obesidad y sus enfermedades derivadas tendrán el impacto más grande en el PIB entre 2020 y 2050.

Según el estudio, en México, lograr una reducción calórica del 20 por ciento en los alimentos con alto contenido en azúcar, sal, calorías y grasas saturadas podría prevenir 1.4 millones de enfermedades no transmisibles de aquí al año 2050.

Además, ahorrar un mil 99 millones de pesos mexicanos al año en costes sanitarios, y aumentar el empleo y la productividad en una cuantía equivalente a 71 mil trabajadores a tiempo completo por año.

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Aplicar cuestionarios es clave para prevenir: SSH

Para la coordinadora estatal de Enfermedades Cardiometabólicas de la Secretaría de Salud en Hidalgo (SSH), Nancy Cerón Delgado, la obesidad y el sobrepeso son enfermedades que en gran medida pueden ser prevenibles.

En ese sentido, puntualizó en entrevista con La Jornada Hidalgo, que el sector salud en la entidad está enfocado en la detección temprana y la prevención del sobrepeso y la obesidad.

“En los servicios de salud se aplica a la población de 20 a 59 años de edad un cuestionario de factores de riesgo, donde además de la medición de talla, el personal de las unidades detecta si un paciente está en riesgo o no de padecer obesidad”.

Explicó que una vez que las personas son diagnosticadas con sobrepeso u obesidad, el personal de salud a través de un tratamiento multidisciplinario e integral brinda la atención de forma individualizada.

De tal manera, dijo la funcionaria estatal, que todos los pacientes creen una mayor consciencia y se sensibilicen sobre el tratamiento adecuado: crear un estilo de vida saludable.

Asimismo, la coordinadora informó que datos preliminares indican que de enero a diciembre de 2022 se realizaron 301 mil 990 pruebas de obesidad, de las cuales resultaron positivas 32.36 por ciento (97 mil 723).

Cerón Delgado indicó que dicha cifra es un dato esperado dadas las acciones que se están haciendo para intentar identificar de manera oportuna y porque a raíz de la pandemia aumentaron las acciones de prevención, debido al resguardo domiciliario que provocó sedentarismo.

“El cuestionario de factores de riesgo nos ayuda en demasía en lograr incidir de forma preventiva. Es importante que la población acuda a la unidad más cercana de salud a realizarse un cuestionario para saber si hay riesgo, tienen ya obesidad o están en sobrepeso”.

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