Semana Santa, otra prueba contra Covid
Historias que contar
La Semana Santa será nueva prueba para que el Covid-19 no avance, como ocurrió en enero tras festejos decembrinos.
Inicia el próximo 28, Domingo de Ramos, y continúa 29, 30 31, para seguir, en abril, 1, 2 y 3, finalizando el 4, Domingo de Resurrección.
Hay riesgo porque en muchas instancias se suspenden labores Antes, los únicos días no hábiles eran Jueves y Viernes Santos.
Crecen actividades en balnearios, restaurantes, hoteles y centros de incidencia turística. Hay quienes han acatado disposiciones de permanecer más en casa y evitar aglomeraciones salvaguardando la sana distancia, y tienen comprensible deseo de aprovechar asueto. Surgen así peligros de nuevos contagios.
Hasta ahora con particular interés del gobierno estatal y los municipios, se ha logrado ir adelante con menos afectados, a la par con vacunaciones, sin que esto signifique, como en el resto del país, que se pueda cantar victoria.
Ojalá no caigamos en la seductora forma de disfrutar con una apertura, hasta hace años tradicional, y guardemos comportamientos que los expertos recomiendan.
Contraste de apreciados periodistas
La semana pasada dos conocidos periodistas, Abraham Ramírez Reyes y Francisco Lozada Sánchez, con carreras cupulares en El Sol de Hidalgo, enfrentaron destinos diferentes. El primero falleció, el segundo fue reconocido por el Club Pachuca tras 45 años dedicado a la información deportiva.
Con Abraham Ramírez, vinculación más directa por tareas de actividades cotidianas, y sumando coincidencias de horario, frecuentes reuniones con otros compañeros desmenuzando variados temas.
Él mantenía acercamiento de amistad y respeto con quienes ya eran identificados por actividades políticas y de servicio, entre otros el hoy gobernador Omar Fayad y Benjamín Rico.
En céntrico café se llevaron a cabo entrevistas, nada solemnes y sin recato de temas.
Pero, además, con Abraham Ramírez se llegó a más, al formalizar un compadrazgo por ambos concertado. Se tomaron después caminos diferentes. Tras casi cuatro años, solo hubo una vez feliz coincidencia, y con sentido informativo común: charla con Luis Baños.
Fue hasta el viernes pasado que supe que el inquieto compadre había fallecido.
A sus hijos, su familia en general, sentido pésame por la que fue dolorosa desaparición.
Con Francisco Lozada, tenaz en sus responsabilidades, fluían comentarios sobre actividades de su competencia. Casi desde las 17 horas empezaba con quienes le apoyaban en sus tareas, que se prolongaban hasta minutos del día siguiente.
Casi recién llegado a Pachuca, era difícil encontrar hospedaje. Francisco Lozada me dijo que su mamá, Rosita Sánchez Flores, respetable dama ya desaparecida, quien, vivía en el Callejón de Rosales, rentaba un departamentito. Ahí viví en meses placenteros.
Este signo amistoso nos identificó, prevaleciendo con él y con sus hijos Iván e Irving Lozada León que han abrazado inquietudes periodísticas de sus padres, como su mamá, Olga León, primera mujer en la entidad dedicada a coberturas deportivas.
No es el fin
¿Epílogo? ¿Final? No, pequeñita Nicole. Estás en lo alto, en el cielo. Tu pelo tirando a rubio, ojos de cándidos siete años. No se olvidará de lo que fuiste objeto. Compromiso con tus padres, tus seres amados. Vigilantes con todos aquellos pequeñitos victimados por enfermos, mal nacidos. Algún día, Nicole, nos veremos, yo un poquito atrás de ti, en la cima donde hoy descansas. Rogaremos para que tan deleznables hechos no se repitan. Lo haremos en salvaguarda a tu memoria.