DANIEL-FRAGOSO-EL SURTIDOR

Mundos digitales

Una imagen o un video no son relevantes por ser nuestros sino por la representación de nosotros en el contexto o la historia de ellos.

Daniel Fragoso
Abril 27, 2025

Michael Onfray señala que “Diógenes se convertía en un epifenómeno molesto que había que reducir y hasta destruir: y eso fue lo que se hizo en principio en nombre de la moral y las buenas costumbres, y luego de la ciencia y de la seriedad filosófica. Por un lado, los émulos de Víctor Cousin; por el otro, los de Hegel.

Ahora bien, Emile Bréhier ha desarrollado una idea extremadamente interesante sobre el tema.

Lejos de las preocupaciones relativas a las escuelas y las filiaciones y de los debates estériles sobre los precursores y las fuentes, Bréhier afirma: “En la historia de la filosofía, siempre conviene remitirse a los esfuerzos intelectuales de los individuos; sería vano buscar en ella tipos de sistemas, clases de conceptos fijos y rígidos que habría que tomar o dejar de lado y que deberían sucederse según un ritmo definido; sólo existe el pensamiento individual, que recibe influencias de otros pensamientos individuales y obra a su vez sobre otros”.

Pienso en esto y en la satisfacción de lo que pensamos como necesidades lo cual logra que adquiramos objetos y sucesos desechables, experiencias inmersivas de ilusiones pasajeras.

Nos obsesionamos ya no con los objetos, si no con la información, los datos y las historias de esos objetos.

Una imagen o un video no son relevantes por ser nuestros sino por la representación de nosotros en el contexto o la historia de ellos. Parece que, si permanecemos presentes en nuestras redes sociales, al ser más libres, más transparentes, más honestos, estamos más aprisionados. Estamos aislados e interconectados.

Las presiones para estar conectados en las redes sociales producen aislamiento, ensimismamiento, la búsqueda de la compensación directa e inmediata que necesitamos para seguir el paso de la ardua vida cotidiana, afirmó Alejandro Peña García, académico de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) en la Gaceta de la UNAM.

“Las formas de ser en la era digital han creado otras tantas formas de soledad. El imperio de las redes sociodigitales, basado en el desarrollo tecnológico de los medios de comunicación en las últimas décadas, plantea una condición paradójica en las sociedades modernas: estar conectado es una condición casi universal, y es una necesidad fundamental para ser individuo (tener una vida profesional, productiva, sentimental, etcétera)” señala Peña. Si lo pensamos, nos estamos convirtiendo en lo que nos representa en los mundos digitales.