En las mañaneras se nos cuenta la historia de un país que en la realidad no existe, la narrativa es que vamos bien pero en materia económica México anda de capa caída y es importante estar hablando de eso, nuestros problemas crecen día a día y nosotros no nos movemos, estamos prácticamente estancados.
Los especialistas esperan que el Producto Interno Bruto de México crezca este año alrededor del 6%, en otros tiempos esta sería una gran noticia, rayaría en lo histórico, para tener una idea de qué tan bueno sería el dato, en los últimos 30 años México ha hecho crecer su PIB un poco más del 2% en promedio. El problema es que este dato es engañoso, podremos crecer 6%, sí, pero comparado con un año en que la economía cayó 8.5%, es decir, el PIB de este año va a ser 6% mayor comparado con un año muy malo. Imaginen que producen manzanas, en 2019 produjeron 100 manzanas, de repente en 2020 sólo pudieron producir 92, en el 2021 esperan producir 98, su producción de manzanas se eleva mucho comparado con su producción anterior pero ni con eso alcanza para regresar a producir 100 manzanas.
También lee: Sobre la reforma eléctrica
En unos días sabremos cuánto creció el PIB en el tercer trimestre del año pero todo parece indicar que no hay muy buenas noticias. Mientras tenemos el IGAE, que es el indicador que mide la actividad económica, ya lo conocemos para julio y agosto, en julio no creció comparado con junio y en agosto no sólo no creció respecto al mes anterior sino que cayó 1.6%, si en septiembre no hay un buen dato, incluso podríamos estar hablando de una contracción respecto al trimestre anterior. En los últimos tres meses el IGAE ha caído en dos, hoy tenemos la misma actividad económica que en mayo del 2016, hagan de cuenta que se borraron 5 años.
Los datos de empleo también son malos, normalmente lo que se presume son los datos del IMSS, ahí ya casi se recuperaron los empleos perdidos por la pandemia, pero el empleo que se registra en el IMSS es sólo una parte del empleo total, cuando uno ve la película completa la cosa es diferente. La Población Económicamente Activa (PEA) volvió a caer en septiembre, la tasa de desempleo baja pero porque muchas personas salieron de la PEA. Se calcula que en México 14 millones de personas están disponibles para trabajar pero no consiguen un empleo. El economista David Kaplan calcula que desde que inició la crisis hasta septiembre México tiene un déficit de 2.4 millones de empleos. En resumen, el mercado laboral está muy afectado, muchas personas necesitan un empleo, otras tantas ya ni siquiera hacen el intento por conseguir uno, si se tiene la suerte de conseguir un empleo, lo más probable es que sea informal o que el trabajo no sea el que se necesita.
Te recomendamos: Coparmex abordará temas de educación y economía con Congreso de Hidalgo
Pero nuestros problemas no acaban ahí, los mexicanos y mexicanas estamos viviendo con inflación alta, las razones son muchas y algunas de ellas están fuera de nuestro control, la pandemia todavía está causando estragos en el mundo pero mientras son peras o manzanas el dinero que ganamos cada día vale menos, esto afecta especialmente a las personas más pobres, no sólo tienen que vivir con poco sino que además pueden comprar menos cosas. El Banco de México nos avisa que al menos tendremos que vivir con este problema todo lo que resta del año y la mitad del otro.
Por eso no se entienden algunas decisiones de este gobierno como mandar una reforma eléctrica que destruye confianza, afecta inversiones e impide nuevas o como no modificar su gasto para ayudar a que la economía crezca más y más rápido y seguir invirtiendo dinero en proyectos sin mucho futuro, empecemos ya a hablar de lo importante, dejemos las utopías, la ficción y la mentira y concentrémonos en la realidad que vamos para atrás.
