Celebran a las y los Educadores con rifa de 4 autos

En el marco del Día de la Educadora y del Educador, el gobernador Julio Menchaca Salazar estuvo presente en el desayuno organizado para 5,307 personas en salones Perla y donde se rifaron cuatro autos.


El mandatario estatal dijo que antes de asumir su responsabilidad se hizo un compromiso de dignificar y aplicar correctamente los recursos, más de no complicidad.


Aseveró que se continuará trabajando de la mano con las maestras y maestros para que sean un palanca para alcanzar los retos y alcanzar lo que Hidalgo realmente merece.


El primer premio fue para María Teresa Solis Hernández, con número 2434.
Mientras que el segundo auto fue para 4558 a nombre de Rosalba Sagahón García de Tenango.

La tercera unidad fue para Alejandra Bautista Bautista con el número 5329. Y el último auto fue para la portadora del boleto 3400 que fue María de Los Ángeles Montes de Anda.

También estuvieron presentes el titular de la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH), Natividad Castrejón Valdez; así como Alfonso Cepeda Salas, Secretario General del CEN del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE); y el dirigente de la sección XV del SNTE, Said Vargas Sáenz.

Castrejón Valdez agradeció al trabajo cotidianos que realizan los 305 educadores y 5,002 educadoras.

Cepeda Salas afirmó que el respaldo del mandatario Menchaca Salazar ha sido generoso con el gremio.

Comentó que algo de lo que esperan los sindicalizados de la Cuarta Transformación es entre otras cosas que regresen las escuelas de tiempo completo.

Destacó el cariño, entusiasmo y humanismo para enseñar a las niñas y los niños las normas básicas para la interacción social, por eso dijo «me siento profundamente honrado», por ser parte de estos trabajadores que desde hace 80 años iniciaron su labor.

En su intervención el dirigente estatal instó a seguir construyendo la nueva historia del magisterio hidalguense y lamentó la nube de polvo que se tuvo en las instalaciones y que algunos docentes hicieron evidentes, pues sus platos se encontraban sucios.

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