AHORA SÍ

Garlito 

Desde su mismo origen, los grupos de individuos, fueron conformando poco a poco una organización social, para convertir la aldea en asentamiento humano que interconectado entre sí, integraría a las distintas tribus; conjuntar a las aldeas dispersas en un sistema de tribus, cuyos tributos aportarían productos elaborados o agropecuarios para así garantizar seguridad, paz y protección de la tribu dominante, quien decidía la manera de administrar los recursos y su distribución, así como decidir qué era lo más conveniente para la colectividad, sin tomar en cuenta el parecer de estas; ya muy avanzada la organización humana, se tuvo la idea de consensuar estas, y vino el caos que no existía, porque gobernar se convirtió en una posibilidad, hasta para la más mísera tribu. 

Voto 

En Grecia en el siglo V antes de Cristo, recorría entre las clases dominantes, la idea de discutir las ideas para llegar a una que fuera la más adecuada para ser aplicada en beneficio de las mayorías, que desde entonces era ya el denominado pueblo, es decir el nutrido grupo de individuos que tenían solo su fuerza de trabajo como principal recurso, sin propiedades ni riquezas, ni abolengo familiar, era el trabajo, como hoy lo sigue siendo, el único recurso y potencial a desarrollar, este sistema político y social, no precisamente otorgaba al pueblo el derecho de decidir cuál de todas las ideas era la mejor para ellos, sino más bien era la idea que conviniera más al pueblo, sin que éste entrara en la polémica.

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Una élite bien informada, estudiada, con abolengo, riqueza y propiedades, es decir los dueños de los medios de producción, de las tierras, bestias e individuos, una clase dominante, eran quienes en el senado, discutían asuntos de suma importancia para el pueblo, se hacían leyes y reglamentos para el pueblo, se estipulaban responsabilidades y deberes del pueblo, se trabajaba para el pueblo, sin que este interviniera solo como objetivo y meta, la representatividad de los individuos de la aldea, de la tribu y posteriormente los ciudadanos era nula; la utopía del gobierno del pueblo, es desde entonces una utopía, ya que grupos de élite, familias ancestrales, clubes demócratas, partidos políticos y en todos los tiempos delincuentes en el gobierno, nunca han permitido que el pueblo gobierne. 

Nulo 

Ya en nuestro país, la democracia es un anhelo y trabajo de  muchas generaciones, que invierten tiempo y esfuerzo, en algo que incluso no verán, como en todas partes del mundo la difusa figura del pueblo, solo se ve en los discursos y en las discusiones legislativas, como una idea abstracta y son las élites, quienes se ocupan del pueblo; en esta actual administración gubernamental a nivel federal y en muchos estados, como Hidalgo, un movimiento de organizaciones lleva la representación del pueblo, los partidos políticos superados, son la nueva clase social detestada, la partidocracia y su corte de lacayos inepta, la autoridad electoral que en México, no vela por los intereses del pueblo, sino de esa alta jerarquía políticas, que huele, esta sí a dictadura y autoritarismo.

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Todos sabemos que el nefasto INE, desde su mínima expresión organizativa, los comités distritales electorales, los municipales, estatales y federal, son instrumentos de los gobiernos pasados, repletos de personajes que alquimistamente inclinan la balanza para que gane esa partidocracia añeja y maloliente, para que sus consejos sean integrados por mujeres y hombres del antiguo sistema, del viejo régimen que no quiere perder su último reducto gansteril, ser consejeros electorales y perpetrar el fraude electoral como los vimos en todas las elecciones, salvo en la pasada donde si el pueblo vota, imposible es hacer trampa, incluso existen personajes expertos en el fraude electoral y pasan años como parte de la dictadura en el Congreso de la Unión o en el INE. 

Los verdaderos demócratas, perfeccionan los instrumentos, las instituciones y el ánimo de éstas, con el propósito de impedir siga esa partidocracia o élite política y el pueblo sea representado mediante organizaciones no convencionales y cuya agenda, son temas que partidos y politiquillos ignoran, porque en gran medida las políticas públicas del viejo régimen, solo beneficiaban a los que ahora convocan a salvar la cueva  de los ladrones el INE, esa ultraderecha que ahora si ve amenazados sus vanos intentos por perpetuarse, tanto así que incluso el clero mexicano apareció en escena, sosteniendo que la democracia nueva es el diablo; para aquellos que pretenden la transformación del INE, restar elementos inútiles, seleccionar los perfiles y que nuestra democracia no le cueste tanto al pueblo en sueldos de mexicanos que no aportan nada y contradicen la misma esencia, un reconocimiento por intentar mejorar a México. 

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