A 10 años del último vuelo del «Cóndor»
Epopeyas
Twitter: @arturohenkel
Parecería que ha pasado toda una vida desde que uno de los máximos ídolos de nuestra ‘Bella Airosa’: Miguel Calero se pusiera por última vez sus inseparables guantes para saltar a la cancha del ‘Huracán’ enfundado en aquel jersey guinda para disputar lo que serían los 90 minutos finales como jugador de futbol en activo y así dar el colofón a su trayectoria de más de 11 años jugando con sus amados Tuzos del Pachuca.
Y sí, por supuesto que ya se han dedicado renglones en esta su columna de confianza: ‘Epopeyas… de hidalgos, heroínas y otras gestas deportivas’, al querido ‘Cóndor’, sin embargo no podíamos dejar pasar la ocasión de conmemorar los 10 años de aquella mágica noche del sábado 22 de octubre de 2011, cuando la cancha del Estadio Hidalgo fue el escenario para que uno de los jugadores Tuzos más emblemáticos en la historia del Club cerrara con broche de oro su leyenda al colgar el último cero en su puerta ante los Pumas de la UNAM.
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En ese encuentro ante uno de sus más odiados rivales deportivos, a causa de no haberlos podido vencer en una final del balompié mexicano, se había pactado que Miguel saliera de cambio un minuto antes de que terminara la primera mitad para que la afición del Hidalgo le rindiera con aplausos un merecido homenaje al abandonar el terreno de juego; sin embargo, esa noche ante los universitarios la escuadra hidalguense se había quedado con diez hombres a causa de la expulsión de Dionicio Escalante, por lo que Calero tuvo que quedarse en la cancha hasta el final del partido.
Lejos de echar por tierra la fiesta que se le tenía preparada, esto le puso aún más emoción y dramatismo a la despedida del ‘Cóndor’, que esa noche terminó por tener otra de esas actuaciones memorables en las volaba de poste a poste para evitar que los disparos de la ofensiva auriazul se incrustaran en su meta. El más peligroso, el que amenazaba ser un golazo de Paco Palencia, un disparo que buscaba anidarse en el ángulo superior derecho del marco blanquiazul, pero en el que el colombiano estampó por los aires su figura para hacer la última gran atajada de su carrera y así mantener sin horadar su meta.
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Sobre el terreno de juego en el once inicial Tuzo acompañaron al emblemático cancerbero, jugadores como el ‘Zorro’ Héctor Herrera, hoy figura del Atlético de Madrid y la Selección Mexicana; el defensor Leobardo López, quien tras su retiro tomó la estafeta como capitán del Pachuca; los ecuatorianos Segundo Castillo y Jaimen Ayoví, los argentinos Javier Muñoz Mustafá y Segundo Castillo, Enrique Esqueda, Edy Brambila, el citado Escalante, y un jugador al que alguna vez le tocó vestirse de héroe al tomar el lugar de Miguel en la puerta tras una expulsión: Juan Carlos ‘Romita’ Rojas.
Ese fue el último juego oficial del ‘Show’ (como le dicen aún al inmortal arquero Tuzo en su natal Colombia) defendiendo su amada playera blanquiazul. El resto de la historia tras su retiro fue breve y triste para toda la orgullosa y fiel afición del Pachuca, pues poco más de un año después de aquel partido, Miguel dejaría este mundo para convertirse a su partida en una de las más grandes leyendas, al dejar un legado de entrega, calidad humana y amor incondicional por los Tuzos del Pachuca.