Santa, listo para llevar alegría y esperanza a todos los hogares
De trabajar en Luz y Fuerza, Alejandro Carbonell pasó a interpretar a uno de los personajes más queridos y esperados por niños y adultos durante estas fechas
Alejandro Carbonell Ramírez es Santa Claus desde hace 13 años. “Antes trabajé en la Compañía de Luz y Fuerza del Centro, durante 20 años, pero a raíz de las liquidaciones me quedé sin trabajo. En ese momento tuve un cuadro depresivo de tres meses. No salía y solo me dedicaba a comer. Llegué a pesar 154 kilógramos. Con la ayuda de mi familia superé esa etapa y me reincorporé”.
Un compañero le comentó que tenía una barba blanca muy abundante y le invitaba a que se caracterizara de Santa Claus, ya que el cuerpo ya lo tenía.
“Ese diciembre me dieron mi aguinaldo y rápido que me voy a la Ciudad de México. Fui a una tienda muy bonita por Insurgentes. Ahí compré el traje. Regresando a Pachuca me vieron mis hijos y esposa. Quedaron atónitos, les gustó muchísimo. Uno de mis hijos me ayudó a diseñar unas tarjetitas de presentación, no tardaron en marcar para ayudarles en un evento, claro, siempre con la ayuda de mi señora que me ayuda conduciendo el trineo”.
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Don Alejandro recuerda que lo que más le pide la gente a Santa Claus es la salud y el bienestar. “Los pequeños me piden juguetes, celulares y computadoras, ya que es lo más moderno ahora. Alguna vez estuvimos en una fiesta como con 50 niños, todos participaron en grande, se tomaron fotos, me pidieron sus deseos, la pasamos muy bien”.
Carbonell Ramírez, de 58 años, se dedica en su tiempo libre a la pesca en Zimapán. Procura ir cada fin de semana por trucha y lobina. “Entre amigos este tiempo es muy valioso, la sana convivencia es vital”.
“Tenía unas botas que eran de mi papá, tenían borregas muy bonitas, esas fueron las primeras botas que tenía. Ahora, las nuevas me las regalaron mi esposa y su familia”.
Comenta que el traje que porta parece nuevo porque está muy bien cuidado y le da el suficiente mantenimiento. Igualmente, la barba necesita un cuidado especial con un champú específico y un enjuague de aceite para dar brillo y color platinado.
Debido a la pandemia no hubo Santa Claus dos años, incluso se contagió de Covid-19. “Ahora que la pandemia bajó mi agenda se ha llenado y estamos listos para llevar alegría y esperanza a todos los hogares de Hidalgo”.
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Desea que a los hidalguenses les vaya muchísimo mejor, “que le echen ganas, que trabajen mucho. Todo esto va a cambiar. A los niños les pido que se preparen mucho, que estudien mucho, porque la verdad sí se viene medio difícil esto”.
A Santa se le puede contactar a través de su número telefónico, el cual es el 771 204-53-21.
«A los niños les pido que se preparen mucho, que estudien mucho, porque la verdad sí se viene medio difícil esto».
