Morena se prepara
HISTORIAS QUE CONTAR
Será en los últimos días de junio cuando Morena difunda la convocatoria para el proceso de selección de candidato a la Presidencia de la República. Mario Delgado, dirigente nacional del partido lo informó, al precisar, casi simultáneamente, que los aspirantes “deben estar preparados para ganar, pero también para perder”.
Dijo que podrá inscribirse quien lo desee. Sin embargo, tan anhelada posición ha tenido, desde el año pasado por lo menos cinco nombres, de los cuales cuatro parecen estar muy juntos en la línea de salida. Ellos son Claudia Sheinbaum, Jefa de Gobierno de la Ciudad de México; Marcelo Ebrard, titular de Relaciones Exteriores; Adán Augusto López secretario de Gobernación y el senador Ricardo Monreal. El quinto, a quien no se le acreditan muchas posibilidades, es Gerardo Fernández Noroña, diputado del PT.
A la distancia no se advierten otros posibles. El filtro inicial será el Consejo Nacional Morenista. Analizará el primer registro, y de acuerdo con trayectoria, méritos, currículum e identidad, dirá la última palabra para continuar.
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Los considerados estarán en una segunda encuesta definitiva, que a más tardar se llevará a cabo en noviembre, porque el 2 de diciembre es el plazo constitucional para que el ganador (a) renuncie al cargo que desempeñe.
No se advierten hasta ahora ventajas de quienes se intuye van a anotarse.
Sheinbaum, en un principio pareció ir al frente, sin embargo deficiencias en el sistema colectivo de transporte la enfrentaron con insistentes y justas molestias de miles de usuarios.
El tiempo cura heridas, se dice, pero perdió ostensiblemente el privilegio de tener con amplitud los momios a su favor.
Ebrard ha sido cumplido funcionario en la 4T. Encomiendas de AMLO las acata al pie de la letra, pero no parece tener aún atributos de liderazgo natural, aunque en una elección presidencial, la fuerza innegable de su partido le allanaría el camino.
Adán Augusto se promueve en los entornos de las comisiones que le asigna el Ejecutivo, pero no es detentador de un natural apoyo popular.
Monreal se ha ubicado en plataformas de penetración por su sentido natural de atraer a partidarios. Solo que un día parece acatar las reglas del juego y a la siguiente muestra signos de inconformidad porque la senda hacia el poder no está tersa, libre de obstáculos como lo apeteciera.
Fernández Oroña tiene experiencia, pero los espacios de una decisión como esta parecen limitados.
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Alito, un alto en el camino
Sorpresiva resultó la decisión del Instituto Nacional Electoral (INE) de no dar su visto bueno para que Alejandro Moreno, dirigente máximo del PRI pudiera prolongar su gestión hasta el 2024.
La votación de los consejeros fue cerrada, seis en contra, entre ellos la del presidente Lorenzo Córdova, y cinco a favor. Se entendía que el polémico Alito pretendía conducir al Revolucionario Institucional hasta el próximo año en que se resolverían difíciles situaciones electorales como la presidencial, nueve comicios estatales y renovaciones del Congreso y el Senado.
El 19 de diciembre del pasado año habló de ajustar estatutos en el Consejo Nacional del tricolor para validar su permanencia. Inicialmente debería terminar su gestión el 18 de agosto de este 2023.
Los conejeros del INE que no respaldaron su singular iniciativa aludieron la Asamblea Nacional como la adecuada para autorizarlo.
Moreno tiene todavía un camino, el Tribunal Electoral Poder Judicial. Debe esperar.
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