La responsabilidad social en la prevención y detención del delito
In principio erat Verbum
Simón Vargas*
El término responsabilidad social hace referencia al compromiso que tienen todos los miembros de la sociedad entre sí y para con el Estado; y esta idea de coparticipación y ayuda, probablemente, basa sus orígenes en la estructura y sistemas griegos, cultura instituida en la legalidad, el debate y la participación ciudadana.
Pero no sólo los griegos abordaron el tema, sino que también éste fue ampliamente tratado por el jurista, escritor y orador romano Marco Tulio Cicerón en su obra De officiis donde afirma que los deberes son reglas que permiten llevar una vida honesta y donde establece que la justicia es el primer deber o virtud.
La responsabilidad ciudadana va más allá de simplemente obedecer la ley, los deberes son muy importantes para el correcto funcionamiento nacional, de acuerdo con la investigación The responsibilities of citizenship del Think Thank Pew Reserch Center además de votar en las elecciones, pagar los impuestos y participar en censos, otras características importantes de un buen ciudadano son: respetar las opiniones, servir como voluntario y realizar protestas dentro del marco de la ley si se piensa que las acciones del gobierno están equivocadas.
Desafortunadamente, este mismo estudio afirma que los jóvenes dan menos importancia a muchos aspectos de la ciudadanía que los adultos mayores, especialmente cuando se trata de la parte que describe un rasgo o comportamiento como muy importante para ser un buen ciudadano.
Probablemente se considere un sueño imposible, sin embargo, frente a la creciente ola de violencia y crímenes, la protección del Estado y la aplicación de la ley han quedado, si no del todo superadas, sí disminuidas. Y aunque es cierto que las leyes y las políticas públicas deben protegernos y brindar castigos a aquellos que atentan contra la estabilidad social, la solidez y resistencia de las instituciones gubernamentales a efecto de evitar la impunidad, también depende de la responsabilidad social, es decir, es un camino de corresponsabilidad.
Incluso esta cooperación social se ha convertido en uno de los factores para frenar el avance del Covid-19, pero, además, frente al incremento de los secuestros, las extorsiones y la delincuencia, uno de los recursos más importantes es la denuncia, porque sin esta vital participación los criminales continuarán bajo la protección del anonimato.
La prevención del delito aunada a la denuncia oportuna posibilita a las instituciones pertinentes realizar un trabajo eficaz y aunque es innegable que la desconfianza frente a las organizaciones policiacas y de procuración e impartición de justicia ha limitado la participación y responsabilidad ciudadana; la poca participación a su vez se convierte en un enemigo que impide la adecuada implementación de los protocolos establecidos.
Es por ello que hoy más que nunca es necesario privilegiar esta causa, y partir de que nuestra propia vida en un sentido idealista corresponde en parte a la autoridad y en otra a la propia sociedad. Es así como en una época marcada por la celeridad y una creciente desigual, es imprescindible que retomemos la responsabilidad social como una pieza de vital importancia para la justicia.
*Analista en temas de Seguridad, Justicia, Política y Educación.
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