Dos grandes sismos, una fecha: 19 de septiembre
Aunque en diferentes años, el 19 de septiembre permanecerá presente en la memoria de miles de mexicanos que conocieron de cerca la tragedia de quedar sin hogar o la muerte de un familiar por los sismos del 85 y del 2017, algunos incluso, en ambas ocasiones.
Hace tres años se recordaba a las víctimas que perecieron entre los escombros tras el sismo del 19 de septiembre de 1985 con una magnitud de 8.1 grados, y sin embargo cerca del medio día, el recuerdo se hizo todavía más presente cuando en Puebla, México, Morelos, Oaxaca y otros estados, la tierra se cimbró a una magnitud de 7.1 grados.
El sismo tuvo su epicentro entre los límites de Puebla y Morelos con una duración de 1:30 minutos, dejando más de 300 víctimas mortales; siendo la más afectada la Ciudad de México en donde se reportaron 228 muertos y el derrumbe de más de 30 edificios.
Uno de ellos el Colegio Rébsamen que impartía clases para nivel preescolar, primaria y secundaria, lugar donde perdieron la vida 19 menores y siete adultos.
Actualmente se mantiene el proceso judicial el contra de la directora y dueña del inmueble, Mónica G. V., por el delito de homicidio culposo.
En este sismo la ayuda y solidaridad de los mexicanos se hizo presente para apoyar en las labores de rescate, con la donación de víveres y reconstrucción de los hogares; además, cuerpos de rescate de otros países como Japón, China, Colombia, Canadá, Alemania, Argentina, entre otros, arribaron a México para sumar esfuerzos.
Se viralizó la imagen de la perrita labrador “Frida” integrante de la Marina, quien ataviada con sus gafas y escarpines apoyó en las labores de rescate de personas bajo los escombros al igual que varios canes más de los diferentes cuerpos de seguridad y de rescate.
El terremoto del 1985 inició poco después de las siete de la mañana con epicentro en las costas de Michoacán, y aunque no se dio a conocer la cifra oficial de personas fallecidas, diferentes organismos tanto gubernamentales como no gubernamentales dieron a conocer que fue de más de dos mil personas.
Esta tragedia reveló la carencia en la cultura de protección civil que se tenía en México por lo que posterior a ello y como experiencia, se creó el Sistema Nacional de Protección Civil, así como en Fondo de Desastres Naturales, además de establecer una educación de prevención en los espacios y edificios públicos.
A raíz de ello cada año se realiza un simulacro de sismo que también conmemora a las víctimas.
En ambas tragedias se ha destacado la resistencia de la Torre Latinoamericana ubicada en la Ciudad de México, pues pese a ser uno de los edificios más altos, ha resistido los sismos más fuertes desde su construcción .
Ello se debe al diseño arquitectónico con el que está construida, a base de un cajón de cimentación, tres pisos de sótano con columnas robustas a más de 30 metros de profundidad.