El partido político Movimiento de Regeneración Nacional, mejor conocido como MORENA, ha procesado con relativo éxito el nombramiento de su hoy pre- candidato a la Gubernatura de Hidalgo. Si bien es cierto que el proceso presagiaba una tormenta interna, la realidad es que solo generó una que otra llovizna; recordemos que cuando el partido emitió su convocatoria, acudieron a registrarse 52 interesados, lo cual generó mucho ruido, al final el saldo es favorable: solo uno de los registrados impugnó el proceso y se registró como candidato independiente mientras que los otros 50 han mandado señales de su lealtad y permanencia. Así pues, el Senador Julio Menchaca Salazar hoy es formalmente pre- candidato único y en esa calidad ya recorre el Estado entablando el diálogo con los militantes y simpatizantes de su partido.
El Comité Nacional de Elecciones levantó una encuesta para elegir a su pre- candidato y contrató a otras tres casas encuestadoras para realizar encuestas espejo, mismas que arrojaron entre otros datos, que el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador cuenta con una aprobación superior al 70% y que MORENA supera al día de hoy, por más de dos a uno al PRI.
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En la otra esquina, los hidalguenses estamos ahora observando el proceso de selección de candidato en el Partido Revolucionario Institucional, mismo que ostenta el Gobierno Estatal y lo que se trasluce el día de hoy, más allá de los discursos de unidad pronunciados hace unas semanas, acompañados con fotografías de rostros eufóricos y deslumbrantes de aspirantes y liderazgos estatales y nacionales, es una feroz disputa por la candidatura donde los ánimos han rebasado la tradicional disciplina partidista. Ahora los protagonistas de la semana no fueron los aspirantes, Carolina Viggiano e Israel Felix, más bien el Gobernador Omar Fayad y el Presidente Nacional Alejandro Moreno robaron cámara y se enfrascaron en una gresca mediática llena de acusaciones y descalificaciones que muestran que el diálogo político entre ellos está roto y que más allá de quien logre imponer al candidato o candidata, el PRI quedará fracturado, sin posibilidades de arreglo. Si un PRI en completa unidad tenía pocas probabilidades de obtener la victoria, su circunstancia actual anuncia una derrota anticipada.
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MORENA ha anunciado que irá aliado en la figura de candidatura común con el PANALH, el PARTIDO VERDE y EL PARTIDO DEL TRABAJO, mientras que el PRI irá acompañado por el PAN y el PRD, lo que deja poco espacio para que surja otra candidatura con un mínimo de probabilidades de crecimiento, así pues, los electores tendrán que tomar partido por una de las dos alianzas, no hay más.
En mi percepción, MORENA y sus aliados obtendrán una victoria contundente, la coyuntura está plenamente a su favor, pueden atraer a sus votantes tradicionales, incluir a muchos otros ciudadanos apartidistas y también a militantes de otros partidos que han mostrado talento y responsabilidad en su trabajo político. Pienso, que más que concentrar su esfuerzo en ganar la elección, deberían trabajar desde hoy en construir la gobernabilidad que necesitarán cuando tomen, por primera vez, el Gobierno de Hidalgo.
