¿Seguirán los mismos cuatro?
Historias que contar
No dejó de ser sorpresiva la decisión del Consejo Estatal de Morena al elegir cuatro aspirantes a la candidatura por la gubernatura de Hidalgo, el próximo año.
Participaron 52 interesados en la nominación, 19 mujeres y 33 hombres.
En esta primera instancia, los favorecidos fueron la senadora María Merced González, la diputada Lisset Marcelino Tovar, el diputado Francisco Javier Berganza y el delegado de programas federales Abraham Mendoza.
El resultado se supo en el marco de una intervención del delegado nacional morenista César Arnulfo Cravioto Romero, quien llamó a preservar la unidad y, asimismo, nada sutilmente, adelantó quien pudiera ser la carta fuerte del priismo.
Se supone que hubo análisis de las justas pretensiones de los 52 registrados, y que la votación fue ejemplo de celeridad.
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Al conocer nombres de quienes recibieron nominación mayoritaria, extrañaron ausencias de quienes bien se identifican en Hidalgo, entre ellos, primer orden, el senador Julio Menchaca, el legislador Cuauhtémoc Ochoa, la diputada Simey Olvera, la alcaldesa Susana Ángeles y Rufino H. León Tovar.
Quedó bien entendido que esta no fue la instancia definitiva, faltarán opiniones del Consejo Nacional y del Comité Ejecutivo Nacional.
Pueden esperarse modificaciones en la alineación definitiva.
Treviño Medina, voló
Según señalamientos de Emilio Lozoya, la Fiscalía General de la República (FGR) logró orden de captura contra Carlos Treviño Medina, ex director de Pemex, de diciembre 2017 al mismo mes en 2018.
Le imputaron asociación delictuosa y operaciones con recursos de procedencia ilícita; en el sexenio de Felipe Calderón fue responsable de la dirección corporativa también de Pemex.
Se le señaló responsable de recibir 4 millones de pesos para aprobar un contrato multianual con la empresa Braskem, filial de Odebrecht.
Citado el 7 de septiembre pasado, no se presentó.
Se conoce que antes abandonó el país. Treviño Medina presentó una denuncia contra Lozoya. Textual: “Me quieren judicializar y mantener recluido en una prisión de máxima seguridad para obtener de mi persona una declaración falsa contra el ex presidente Felipe Calderón y otros funcionarios con los que colaboré”.
Antes de hacerlo, se fue.
Allen, controvertido
Woody Allen es figura del espectáculo. Nació en Nueva York el 1 de diciembre de 1935. Ha filmado medio centenar de películas, su talento ha sido apreciado con la obtención de premios Óscar, y otros no menos importantes.
Además, se distingue como músico. Clarinetista disciplinado, se interesó en el jazz, el de notas que surgieron, auténticas y melancólicas en Nueva Orleans.
Prevalece un filme titulado Wild Man Blues, con los conciertos que ofreció con su banda en dieciocho ciudades de siete países europeos.
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Pero revela sinuosa personalidad de Allen, renuente a ser casi idolatrado por sus seguidores, y acosado por los paparazzi.
Sin embargo hay “otro” Allen”, quien enfrentó cuestionamientos espalda, pese a que en 2004, Comedy Central lo clasificó en el cuarto lugar de una lista de los 100 mejores comediantes, y que en Reino Unido obtuvo el tercer sitio.
De sus películas, las más elogiadas han sido Annie Hall (1977), Manhattan (1979), Hannah y sus hermanas (1986), entre otras.
Sostuvo una relación con la actriz Mia Farrow; hubo un hijo, Ronan, escritor exitoso, más dos adoptados. Una, Dylan, acusó a Allen de abusarla a sus siete años. Él lo negó.
Farrow, y su pareja anterior, el músico André Previn, adoptaron a Soon-Yi, abandonada en Seúl. Contaba con siete años. Adelante convivió con la pareja Farrow-Allen. Después, a sus 21 años, se unió sentimentalmente con el famoso cineasta, para entonces de 56 años.
Este, cuestionado, aceptó: “Soon-Yi me ha cambiado y hasta me hace comer alcachofas”.
Se casaron, siguen juntos, y como él cita: “Si tiene suerte, encontrarás a la adecuada, como me sucedió a mí”.
