Movimiento contra la reelección de “Alito”
Balcón Político
El ex gobernador de Hidalgo, Manuel Angel Núñez Soto y la ex diputada federal, Martha Gutiérrez Manrique, forman parte de una lista de 2050 priistas que demandan la renuncia de la dirigencia nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y que se posponga la XXIV Asamblea Nacional, en la que temen que Alejandro Moreno Cárdenas, busque reelegirse y así poder nombrar por sí solo a los coordinadores de sus endebles bancadas en el Congreso de la Unión y en los congresos locales.
Además de los dos hidalguenses, hay figuras como los ex gobernadores de Nuevo León, Chihuahua y Baja California Sur y la ex presidenta nacional del CN del PRI, Dulce María Sauri Riancho, quien encabeza esta movilización contra la pretendida reelección de la dirigencia nacional, que forman “Alito” Moreno y la hidalguense Carolina Viggiano Austria.
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La XXIV Asamblea del Consejo Político Nacional, está programada para celebrarse el domingo 7 de julio y de acuerdo con quienes demandan la salida de los dirigentes nacionales, hay una pretensión de Moreno Cárdenas por prolongar su mandato, ese que debió haber dejado desde el año pasado, pero con el pretexto de que había proceso electoral en curso, decidió modificar los estatutos para continuar hasta agosto de este año.
Pero, adelantó fechas y convoca a su asamblea nacional el próximo domingo y el temor de quienes demanda no más reelecciones en la dirigencia nacional, bajo ninguna circunstancia, es que “Alito” modifique los estatutos para prolongar su estancia en la dirigencia nacional y así poder nombrar de manera unilateral a los coordinadores en las Cámaras de Diputados Federales y de Senadores, además de los congresos locales.
Los inconformes argumentan que, con Alejandro Moreno, el partido ha perdido espacios y votos desde el 2021 y este año “el PRI obtuvo los peores resultados de su historia. El 2021 el tricolor perdió ocho gubernaturas (incluida la tierra de “Alito” Moreno, Campeche).
Desde entonces se pidió la renuncia de “Alito”, pero él, “indebidamente” extendió su mandato hasta agosto del 2023 y ahora, antes de concluir el proceso electoral 2023-2024, “violando la normatividad” convoca a asamblea para operar otra reforma estatutaria que permita su reelección como presidente y para concretar más atribuciones como nombrar directamente a coordinadores de sus menguadas fracciones parlamentarias federales y locales.
Por eso, los abajofirmantes de un documento público, piden que se separe del cargo, se designe a un grupo de ex presidentes del PRI y personajes de trayectoria y prestigio, para constituir una dirigencia interina que prepare la próxima asamblea.
Veremos si “Alito” no sale con su “domingo siete” y maniobra para mantenerse en la dirigencia de un partido que camina hacia su extinción.
