Jóvenes feministas seguirán dando la batalla en 2021: activistas
Las movilizaciones que este 2020 protagonizaron las mujeres, como el 8 de marzo y el 25 de noviembre en toda la entidad no se han terminado ni con la pandemia, pues las activistas han realizado un trabajo de acompañamiento en casos de violencia.
Diana Avilés, activista de Seiinac y Bertha Miranda Rodríguez, defensora de derechos sexuales y reproductivos, en entrevista por separado coincidieron en que las jóvenes están impulsando este movimiento feminista que en 2021 continuará dando la batalla.
Ante un contexto de pandemia que inició en marzo de 2020, justo después de la manifestación que congregó a cerca de cinco mil personas en la Plaza Juárez de Pachuca para exigir el fin de la violencia contra las mujeres, para las activistas esto no apagó el movimiento, únicamente lo redireccionó.
“Muchas activistas estamos realizando acompañamiento en el tema de observar las medidas de protección, pero veo que la población de jóvenes son quienes está dando la batalla”
Bertha Miranda Rodríguez, defensora de derechos sexuales y reproductivos.
La activista destacó que las actividades en línea de talleres y cursos están permitiendo que más personas conozcan de sus derechos.
Para Diana Avilés, integrante de la organización Servicios de Inclusión Integral y Derechos Humanos AC (Seiinac), la pandemia permitió que “muchas compañeras se formen y capaciten en materia de derechos” y advirtió que el movimiento no se ha apagado por el contrario se está fortaleciendo”.
Recordó que el 25 de noviembre pasado, cuando se rememoró el Día de la no violencia contra las mujeres, salieron a las calles nuevamente para denunciar las agresiones. “Esperamos que pronto pase la pandemia porque el 8 de marzo nuevamente vamos con todo”, adelantó.
Sobre el impacto de «El 9 Ninguna se Mueve» cuya repercusión fue nacional, Bertha Miranda detalló que permitió visibilizar la violencia que enfrentan las mujeres en espacios laborales.
Aunque reconoció que “entre los grandes retos está lograr la conciliación en el espacio laboral y el espacio privado, pues mientras que una mujer está generando recursos, los gobiernos tienen que generar alternativas para apoyarlas en actividades como la crianza como guarderías y otros espacios”, explicó Miranda Rodríguez.