Fuerza, Andrés
Alameda
Mucho revuelo causó el tuit del presidente de México donde informaba sobre su contagio de COVID-19 y que su corazón se encontraba “al 100”.
“Ni modo, amigas y amigos: salí positivo a COVID-19. No es grave. Mi corazón está al 100 y como tuve que suspender la gira, estoy en la Ciudad de México y de lejitos festejo los 16 años de Jesús Ernesto. Me guardaré unos días. Adán Augusto López Hernández encabezará las mañaneras. Nos vemos pronto.”
El anuncio de López Obrador sobre la actualidad de su salud dejo –nuevamente– al descubierto a medios, comunicadores y a la derecha conservadora de este país, quienes bajo la intriga de la “falta de información oficial” –¿Qué hay más oficial que la cuenta de twitter del presidente?– difundieron información falsa sobre la salud de López Obrador, argumentos que fueron desnudados por Adán Augusto en la mañanera de este pasado lunes.
Hay que decir, que otra de las narrativas que fueron esgrimidas por los medios de comunicación, fue sobre quien quedaría no al frente de las decisiones trascendentales de México, sino de «La mañanera»; y es que para aquellos que nos quieren hacer creer que todos los grandes males de este país iniciaron el 1ro de julio del año 2018, «La mañanera» es un espacio crucial que desarregla todo el debate de la cosa pública en función del relato único al cual estábamos –mal– acostumbrados.
Debemos mencionar que para los opositores al presidente Andrés Manuel y la Cuarta Transformación, la postura más cómoda es no hablar sobre las grandes desigualdades que hoy en día aún prevalecen en nuestro país, «La mañanera», nos ha permitido otra manera de confrontar a las dos visiones de Nación que hoy se encuentran en pugna, si bien es cierto que las y los conservadores no tienen proyecto, ya que solo les interesa aliarse electoralmente para volver al pasado y que sus esfuerzos los centran únicamente en proyectar odio hacia Andrés, generando únicamente ruido en el debate público, en un país donde por primera vez en mucho tiempo podemos decir lo que queramos con total libertad.
Los opositores no entienden que es lo que hoy está pasando en este país, o cuando menos ya paso aquello que estaban medianamente entendiendo, los mueve un relato opositor lleno de mentiras, inventan un país que la mayoría de las y los mexicanos sabemos que no existe, usan términos como «polarización» sin darse cuenta que para la mayoría de las y los mexicanos, esa polarización significa aparecer por primera vez en mucho tiempo en las decisiones publicas de México.
No se necesita ser un inmaculado analista político para darse cuenta de que lo único que ofertan los partidos del viejo régimen son cálculos políticos basados y articulados en prejuicios, ante un Andrés que está cambiando la estructura de todo lo que conocemos en la esfera publica.
«La mañanera» abre un nuevo relato con distintas clases sociales en disputa.
Por Dino Madrid