Enojo en el Clan Universitario
Agujeros negros
La posibilidad real de que Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) por paridad de género reserve Tulancingo de Bravo y Mineral de la Reforma para mujer, aumentó el malestar en Valle de Cáceres en el lujoso fraccionamiento Valle de San Javier, porque de confirmarse cierra el paso a piezas importantes que el Clan Universitario quiere jugar, porque representan el cambio generacional del grupo que domina a la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) desde 1982.
Gerardo Sosa con el proceso legal que enfrenta está y estará inhabilitado para asumir en el futuro un cargo de elección popular así que para garantizar la subsistencia de su grupo de permanencia requiere nuevos cuadros y que mejor que los sobrinos, los hijos de Damián y Agustín, por eso le han costeado la campaña de posicionamiento en Tulancingo a Salvador Sosa Arroyo, el hijo de Damián.
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Pero no sólo ellos, en su lista están Jorge Hernández Araus, Jorge Mayorga Olvera, Osiris Leines a la que habrá de agregar nombres de por lo menos tres mujeres, por eso amagan con utilizar su franquicia del Partido del Trabajo (PT) para postular a leales afiles y caballos de su ajedrez político, para tener monedas de cambio y estar en condiciones de negociar votos en el Congreso.
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También apoyos en los municipios al proyecto estatal, aunque en este proceso eso puede evidenciar su fuerza real, que no suma la comunidad universitaria y no es lo mismo actuar al amparo de un partido como sucedió por años a la sombra del Revolucionario Institucional (PRI) o de Morena, que tener que operar como partido político con recursos propios y sólo con su estructura conformada por un puñado de alumnos, empleados y académicos a quienes compran con becas y calificaciones o la amenaza de perder sus empleos..