Empresarios mexicanos piden ayuda diplomática en conflicto con firma china por rehabilitación del Metro
Empresarios mexicanos subcontratados en el proyecto de rehabilitación y modernización de la Línea 1 del Metro de la Ciudad de México han solicitado la intervención de la Embajada de México en China para mediar en un conflicto con la empresa paraestatal china CRRC. Los empresarios enfrentan pérdidas económicas significativas debido a lo que describen como irregularidades en los contratos y una comunicación deficiente con las autoridades corporativas de CRRC.
Esta petición se produce después de agotar los canales de comunicación tradicionales con CRRC, sin lograr una respuesta que los empresarios consideren satisfactoria. Los afectados han intentado múltiples veces resolver la situación directamente con las empresas chinas, sin éxito. Frente a la falta de progreso, los empresarios ven la intervención del cuerpo diplomático como esencial para facilitar un diálogo constructivo y justo.
Además, los empresarios han buscado apoyo de los altos mandos en las empresas CRCC y CRRC ante el retraso en los pagos por parte de las filiales de la paraestatal china. A pesar de que el Gobierno de la Ciudad de México ha cumplido con los pagos por las obras de rehabilitación de la Línea 1, conocida como la línea rosa, los subcontratistas aún no han recibido los fondos necesarios para comenzar o continuar con las obras en vías, estaciones y talleres del Metro.
Ramón Martínez Arnabar, representante legal de Ingeniería y Servicios Inmobiliarios Latam (Grupo ISI), ha enviado un comunicado donde exige «el pago inmediato y completo de los fondos que nos corresponden para poder continuar con las labores asignadas de manera eficiente y sin más demoras». Este documento refleja la urgencia de la situación y la necesidad de una intervención rápida y efectiva para asegurar que se respeten y protejan los derechos de los empresarios subcontratados.
Este llamado a la intervención diplomática muestra la gravedad del conflicto y subraya la dependencia de los canales diplomáticos como medio para buscar soluciones justas en disputas internacionales de esta índole.
Los empresarios afectados confían en que la intervención de la Embajada pueda desembocar en un diálogo que finalmente permita subsanar las pérdidas económicas y asegurar la continuidad de las obras en uno de los proyectos de transporte más críticos de la capital mexicana.