Debates a la vista
Historias que contar
Aprobados por el Instituto Estatal Electoral de Hidalgo (IEEH) ya se oficializaron sedes y fechas de tres debates en que participarán los tres candidatos a la gubernatura: Carolina Viggiano, Julio Menchaca y Francisco Javier Berganza.
El primero se realizará el 21 de abril en Huichapan, seguirán, el 12 de mayo en Huejutla, para cerrar 26 de mayo en Pachuca.
Serán escenarios de libre discusión de ideas, sin cabida a pronunciamientos de discriminación o violencia.
Los electores podrán enviar con oportunidad preguntas relacionadas con temas que en particular les interesen, para normarse criterios según las respuestas.
Sigue leyendo: Pachuca, Huejutla y Huichapan sedes de debates rumbo a la gubernatura
Los debates se iniciarán a las 19 horas. No se ha informado si se trasmitirán, ya sea por redes, o estaciones de radio.
La forma en que se conduzcan los aspirantes podría ser fundamentales al momento en que se sufrague, el 5 de junio.
Se infiere que denuestos o acusaciones más allá de una civilizada forma de debatir, se revertirán por si alguno perdiera los bártulos y confundiera escenarios con candente lucha verbal bajo el amparo de un ring.
Cuando el corazón se detiene
Eugenia Debayle cuenta su historia de amargos recuerdos. “Estaba a punto de casarme e iba ser mamá. Pero un suceso lo transformó todo. Fui a una revisión médica y no salí del hospital en meses. Mi corazón se detuvo por 3 minutos, estuve 20 días en coma y 2 años en rehabilitación. Me rompí”.
Del éxito pasó a la desesperanza.
Nacida en Nueva York, de padres originarios de Nicaragua, cuando era apenas una niña vino con su familia a México, donde vivió y creció.
Entre otros logros fundó The Beauty Effect, plataforma digital de contenido de belleza.
Breve introducción en su texto Mi día negro, conmueve: “Este libro está dedicado al hijo que nunca fue, mi intuición me dice que ibas a ser niño. Gracias por enseñarme que soy más fuerte de lo que pensaba”.
“Estuve muerta por tres minutos. Muerta. Out. No hubo túnel, no vi una luz, ninguna de esas cosas que cuenta la gente que ha estado cerca de la muerte”.
Te recomendamos: Justicia a los maestros
“Para mí no fue eso. No hubo imágenes ni sonidos”.
“La línea del monitor que reflejaba mi ritmo cardiaco se detuvo en seco. Tres minutos…y nada, mi corazón había dejado de responder. De inmediato, los doctores entraron en acción. Trataron de resucitarme durante 43 minutos…y no se rindieron…aplicándome respiración cardiovascular, la famosa CPR, y al final lo lograron. Volví”.
La estabilizaron, y apunta: “La gente me iba a ver peo yo no estaba…No sé cómo explicarlo, como que mi alma no estaba conmigo. Estaba yo, presente, pero solo mi cuerpo. Faltaba la otra mitad de mi ser”.
Su familia le contó que uno de los días más shockeantes el doctor les dijo abiertamente: “Hay dos opciones: o Eugenia se muere o se queda en estado vegetal”.
Su perspectiva es que sería difícil que volviera a incorporarse.
Pero lo hizo, ante malestares físicos, que superó, y los otros, convencerse a si misma que podría ser la de antes, jubilosa, trabajadora, creativa. Como escribe, estos llegaron a ser los más complicados.
Al final, su libro es una llamada a cualesquiera que todo se puede superar, con voluntad, empeño aunque en algunos días el mundo parece que se cierra para siempre.
De Editorial Planeta Mexicana, S.A de C.V., la primera edición impresa en México fue en octubre de 2019, con una reimpresión en diciembre del mismo año.
