Aún esperan que Tecnosilicatos haga saneamiento en El Huixmi

A raíz de que el lixiviado se está filtrando a la celda de junto y a otros terrenos, dañando fuertemente la zona

A cuatro meses de que las autoridades ambientales clausuraron la celda 6 (emergente) que construyó Tecnosilicatos de México S.A. de C.V. en el basurero de la localidad El Huixmí en Pachuca, se espera que la empresa realice el saneamiento.

Cabe recordar que dicha celda fue suspendida por la Semarnath el 1 de septiembre de 2022, como medida de urgente aplicación en protección al medio ambiente, luego de que tenía permitido operar hasta el 4 de junio de 2021.

“A la fecha, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo (Semarnath) está realizando el análisis correspondiente y seguimiento del tema para que la empresa que operó la celda número 6 aplique acciones de saneamiento en cumplimiento de la NOM-083-SEMARNAT-2003”.

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Lo anterior informó el área de comunicación social de la dependencia estatal a este diario, a raíz de que hace unos días el medio informó que el lixiviado se está filtrando a la celda de junto y a otros terrenos, dañando fuertemente la zona.

Según la NOM-083-SEMARNAT-2003, los lixiviados son sustancias que pueden infiltrarse en los suelos o escurrirse fuera de los sitios en los que se depositan los residuos, que provocan deterioro al suelo y cuerpos de agua. Representan un riesgo potencial a la salud humana y de los demás organismos vivos.

La normativa señala que se debe elaborar y operar un programa de mantenimiento de posclausura para todas las instalaciones del sitio de disposición final, por un periodo de al menos 20 años.

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Sobre la cobertura final de la clausura señala que se deben aislar los residuos, minimizar la infiltración de líquidos en las celdas, controlar el flujo del biogás generado, minimizar la erosión y brindar un drenaje adecuado.

En mantenimiento, se debe elaborar y operar un programa de mantenimiento de posclausura para todas las instalaciones del sitio de disposición final, por un periodo de al menos 20 años.  Establece que este periodo puede ser reducido cuando se demuestre que ya no existe riesgo para la salud y el ambiente.

El programa debe incluir el mantenimiento de la cobertura final de clausura, para reparar grietas y hundimientos provocados por la degradación de los residuos sólidos urbanos y de manejo especial, así como los daños ocasionados por erosión (escurrimientos pluviales y viento), especifica la norma.

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