Abraham Mendoza, su pasado le ayuda
Agujeros Negros
El delegado de Bienestar, Abraham Mendoza Zenteno, es caso raro en la política de Hidalgo, ahora que fue ubicado entre los cuatro mejor posicionados de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en la recta final del proceso interno para definir la candidatura al gobierno de Hidalgo atrás del senador Julio Menchaca Salazar y del diputado federal Cuauhtémoc Ochoa Fernández.
Raro, porque no tiene posicionamiento a través de su trabajo como delegado de los programas federales de desarrollo en los últimos tres años, por el contrario, repetidamente ha sido cuestionado por propios y extraños, primero cuando estableció alianzas y otorgó espacios al Clan Universitario de Gerardo Sosa Castelán, que lo llevó a rompimientos con otras expresiones internas.
A Mendoza Zenteno, se le atribuye en parte la derrota de Pablo Vargas González en las elecciones para presidente municipal de Pachuca en octubre de 2020 y luego se dijo que operó la estructura de Servidores de las Nación apoyando a unos y boicoteando a otros, en suma, se volvió un hombre polémico para Morena a lo que contribuyó su introvertida personalidad.
También le acusaron de la campaña Un Fundador será Gobernador, para descalificar a Julio Menchaca, Cuauhtémoc Ochoa y al diputado local Francisco Xavier Berganza, ahora fuera de la encuesta; pero resulta de Mendoza Zenteno no es fundador de Morena, su nombre no aparece en las asambleas de septiembre de 2013, él entra en escena hasta 2015 donde le gana la presidencia estatal a Martín Sandoval Soto, por un solo voto.
Hoy, está en la encuesta que definirá la candidatura a gobernador de Hidalgo, por su trayectoria, antes de llegar a Morena; la de luchador social, hombre de izquierda y militante del Partido de la Revolución Democrática (PRD) donde conoció a Andrés Manuel López Obrador y, no lo podían dejar fuera de la lista aunque su posicionamiento sea lejano al de los legisladores y su trabajo como delegado de Bienestar esté severamente cuestionado.